Los jóvenes intercambiaron más de 100 mil mensajes entre chats de WhatsApp, mensajes de texto y charlas a través de redes sociales.
El grado de relación entre Nahir Galarza y Fernando Pastorizzo, victimario y víctima del crimen de Gualeguaychú, es clave para determinar los agravantes del homicidio. Por ese motivo, las partes y el fiscal Sergio Rondoni Caffa ya analizan los más de 100 mil mensajes entre los jóvenes.
Los datos pertenecen a conversaciones de WhatsApp, Facebook e Instagram, redes por las cuáles frecuentemente se bloqueaba y desbloqueaban por los vaivenes de su relación. Estos corresponden al teléfono de Galarza, ya que ni familiares ni amigos conocían la contraseña del teléfono de Pastorizzo.
El IPhone 6 de la joven fue analizado durante nueve días por un técnico especializado en la Procuración General de Paraná. Para peritar el teléfono de la víctima se necesitaría comprar una tecnología que la Procuración no dispone.
“La defensa dice que de ninguna manera, que van a exigir la compra del dispositivo, por la arbitrariedad de mostrar un solo teléfono, aunque queda claro que es a favor totalmente de Nahir porque se nota la violencia de género”, manifestó Jorge Zonzini, vocero mediático contratado por los Galarza.
La información se va a cruzar con 500 mil mensajes más provenientes de grupos de WhatsApp de amigos tanto de Galarza como de Pastorizzo.
Zonzini insistió en la defensa que plantea la familia Galarza: que Nahir sufría violencia de género por parte de su pareja y que eso la llevó a matarlo el 29 de diciembre pasado. “La defensa está volcando información privada entre dos personas. Son mensajes íntimos”, opinó al respecto el fiscal Rondoni Caffa.
El representante del Ministerio Público adelantó que en la segunda semana de febrero se realizará una pericia psiquiátrica a la joven para determinar si es imputable, como paso previo al juicio oral.
